
Era una calurosa mañana de junio, me desperté con un
cosquilleo en el estomago que nunca había tenido, era una sensación extraña
pero sabia porque era. Pasaron las horas y ese cosquilleo se intensifico apenas
puede comer algo ¡que nervios! Llegaron las 4:15 de la tarde, llego el momento,
el momento en el que subiría a un autobús para conocer a alguien que me cambiaria
la vida. Tras casi una hora y media de viaje llegue a la ciudad, todo era nuevo para mí,
nunca había visto aquel sitio, aquellas calles,
aquella gente, pero no había ido a ver esos sitios, había ido a verla a ella.
Baje del autobús y me vi solo en aquella estación, no había nadie conocido asique
me dispuse a salir a la calle, tomar el aire y tener una visión más general con
la que pudiese divisar a mi anfitriona. Aunque no hizo falta, de camino a la
puerta me la cruce, una chica de pelo castaño, ojos marrones, no demasiado alta
y muy moneta. Paso muy atacada a la estación, venia con prisa, tal vez porque
no quería hacerme esperar, se cruzo conmigo, y apenas me reconoció, asique me decidí
a hablarla. Tras un simple saludo me mostro su sonrisa, una sonrisa que me
cambiaria la vida. Después de la primera impresión nos decidimos a hacer un
poco de turismo por aquella ciudad, un parque enorme, una fuente fuera de lo común
que nos sirvió de ducha traicionera, fue una tarde divertida.

Cayó la noche e improvisemos una cena muy sofisticada,
pizzas del mercadora y vino manchego, el mejor de nuestros lugares de origen,
todo ello servido en unas copas de cristal refinado, comprados en un chino
cercano, solo faltaron las velas jaja. Y entonces comenzó todo. Ella estaba radiante
unos ojos marrones que mantenían una mirada risueña y alegre, una sonrisa capaz
de mover ejércitos, una melena castaña, y una simpatía y un cariño que nunca había
encontrado en una chica. Ese día vi que era ella, ella era mi chica, debía serlo
y entonces todo empezó. Todo empezó un 14.
A partir de ese día mi vida cambio, deje de estar solo ante
la vida, ante las adversidades, la tuve a ella. Tuve una razón para luchar
contra lo que fuera, para intentar ser mejor persona, para luchar contra mis
defectos, para triunfar.
Y todo esto empezó un 14…